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Nutrición y Salud: 10 Consejos
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Nutrición y salud van unidas: Comer sano es la clave del bienestar.
“Que el alimento sea tu medicina y que tu medicina sea tu alimento”, decía hace 25 siglos el médico griego Hipócrates de Cos, al que se considera el padre de la medicina.
Una mala calidad del aire o del agua, la falta de ejercicio y una alimentación inadecuada nos llevan a un deterioro de la salud, incluso a la enfermedad en sus distintas formas, a sentir fatiga y cansancio que baja la autoestima, provoca cambios de humor y aumenta el riesgo de sufrir depresión.
Los alimentos ricos en fibra y los cereales integrales tienen un carácter preventivo para algunos tipos de cáncer, como el de colon y el de estómago. Entre los alimentos considerados como “buenos” ya que levantan el ánimo y aumentan la vitalidad, se encuentran: los hidratos de carbono sin refinar, los alimentos orgánicos, las proteínas y las grasas vegetales como el aceite de oliva virgen extra.
¿Cómo conectar con el cuerpo y escuchar la sensación de hambre? Para ello hay que reducir la cantidad de alimentos ingeridos y salir de los hábitos y rutinas que nos hacen comer más de lo que es necesario. A veces retenemos líquidos, las digestiones se vuelven pesadas y ciertos órganos de nuestro cuerpo tienen que hacer un trabajo excesivo; se hace difícil dormir bien y tener un sueño reparador, que es esencial para que el organismo descanse y se recupere.
Los alimentos que ingerimos son el combustible que da a nuestro cuerpo la energía que necesita para funcionar bien; si el combustible es de mala calidad, no nos sentimos bien, afectando a nuestro ánimo, apetito, capacidad mental;, a nuestra libido y al sueño.
Como pauta general, se recomienda aumentar la toma de alimentos en base a los beneficiosos que sean para el cuerpo. Los mejores para la salud son:
Las verduras: preferentemente al vapor, procurando no cocerlas demasiado, para que mantengan todos los minerales y vitaminas. Hay que usar aceites vegetales de 1ª presión en frío.
La fruta: hay que intentar tomarla en ayunas con el estomago vacío o a media mañana o media tarde. Hay que comer preferiblemente frutas de temporada.
La ensalada: es también un magnifico alimento, combinada con frutos secos crudos, aguacate y aceites de 1ª presión en frio. Es mejor tomarlal medio día que por la noche.
Las legumbres, como lentejas, garbanzos o judías: cocidas o en ensalada, son también muy buenas para la salud.
Otros alimentos muy beneficiosos son: el pescado, las aves y huevos (a poder ser ecológicos) y algunos lácteos como el yogurt o kefir.
Por el contrario hay que:
Disminuir el consumo de sal y azúcar.
Suprimir de nuestra dieta la leche, los embutidos y chacinas, así como los productos refinados.
Eliminar el consumo de alimentos procesados, con conservantes y colorantes, los refrescos y los productos light.
Estos 10 consejos sobre nutrición sirven para mejorar la calidad de vida y depurar el organismo:
Toma de alimentos: para tener una digestiones más ligeras, las carnes, lácteos, pescados, huevos y frutos secos no deben combinarse con cereales, pan, pasta, harinas y galletas; por el contrario, ensaladas y verduras combinan con todo.
Hidratarse adecuadamente: con tisanas depurativas, hierbas como el tomillo o el romero, la alcachofa, cola de caballo, depurativas para el hígado y los riñones. También hay que tomar agua de calidad, té pu-erh, Rooibos y te Mu.
Cuidar el intestino: con alimentos marinados y que fermentan por sí solos, como los pepinillos, cebollas, zanahorias, nabos, jengibre, repollo, alcaparras, olivas, kombucha y Aloe Vera.
Exposición al sol: es recomendable exponerse al sol 20 minutos al día con el cuerpo desnudo; de esta forma se consigue que el cuerpo produzca vitamina D.
Hacer ejercicio físico regular: caminar 1 hora al día y hacer estiramientos musculares, para tonificar la musculación y activar la circulación sanguínea.
Ayunar un día a la semana: tomando fruta y verdura, o tomando en la cena únicamente verdura uno o dos días a la semana, con el objeto de limpiar y depurar los órganos internos sobrecargados.
Hidroterapia: con baños de mar o en balnearios; también se puede practicar en casa, añadiendo 2 kilos de sal marina a la bañera; por un efecto de osmosis, se depura el organismo, incorporando sales minerales al cuerpo y desechando residuos. También con
Tomar alimentos de apoyo, depurativos y energizantes: algunos de ellos son el ajo y la cebolla, tanto natural como en guisos, con la alternativa del ajo negro; las semillas de sésamo, el umeboshi, la cúrcuma, los frutos rojos, la granada, el polen de abeja, las semillas de chia, la quinoa; y como edulcorante el sirope de arroz y la miel.
Tomar alimentos ricos en calcio: el calcio se puede obtener de las almendras, garbanzos, sésamo, brócoli, coliflor o col y sardinas. Sirve para mejorar la salud de nuestros huesos y dientes.
“Que el alimento sea tu medicina y que tu medicina sea tu alimento”, decía hace 25 siglos el médico griego Hipócrates de Cos, al que se considera el padre de la medicina.
Una mala calidad del aire o del agua, la falta de ejercicio y una alimentación inadecuada nos llevan a un deterioro de la salud, incluso a la enfermedad en sus distintas formas, a sentir fatiga y cansancio que baja la autoestima, provoca cambios de humor y aumenta el riesgo de sufrir depresión.
Los alimentos ricos en fibra y los cereales integrales tienen un carácter preventivo para algunos tipos de cáncer, como el de colon y el de estómago. Entre los alimentos considerados como “buenos” ya que levantan el ánimo y aumentan la vitalidad, se encuentran: los hidratos de carbono sin refinar, los alimentos orgánicos, las proteínas y las grasas vegetales como el aceite de oliva virgen extra.
¿Cómo conectar con el cuerpo y escuchar la sensación de hambre? Para ello hay que reducir la cantidad de alimentos ingeridos y salir de los hábitos y rutinas que nos hacen comer más de lo que es necesario. A veces retenemos líquidos, las digestiones se vuelven pesadas y ciertos órganos de nuestro cuerpo tienen que hacer un trabajo excesivo; se hace difícil dormir bien y tener un sueño reparador, que es esencial para que el organismo descanse y se recupere.
Los alimentos que ingerimos son el combustible que da a nuestro cuerpo la energía que necesita para funcionar bien; si el combustible es de mala calidad, no nos sentimos bien, afectando a nuestro ánimo, apetito, capacidad mental;, a nuestra libido y al sueño.
Como pauta general, se recomienda aumentar la toma de alimentos en base a los beneficiosos que sean para el cuerpo. Los mejores para la salud son:
Las verduras: preferentemente al vapor, procurando no cocerlas demasiado, para que mantengan todos los minerales y vitaminas. Hay que usar aceites vegetales de 1ª presión en frío.
La fruta: hay que intentar tomarla en ayunas con el estomago vacío o a media mañana o media tarde. Hay que comer preferiblemente frutas de temporada.
La ensalada: es también un magnifico alimento, combinada con frutos secos crudos, aguacate y aceites de 1ª presión en frio. Es mejor tomarlal medio día que por la noche.
Las legumbres, como lentejas, garbanzos o judías: cocidas o en ensalada, son también muy buenas para la salud.
Otros alimentos muy beneficiosos son: el pescado, las aves y huevos (a poder ser ecológicos) y algunos lácteos como el yogurt o kefir.
Por el contrario hay que:
Disminuir el consumo de sal y azúcar.
Suprimir de nuestra dieta la leche, los embutidos y chacinas, así como los productos refinados.
Eliminar el consumo de alimentos procesados, con conservantes y colorantes, los refrescos y los productos light.
Estos 10 consejos sobre nutrición sirven para mejorar la calidad de vida y depurar el organismo:
Toma de alimentos: para tener una digestiones más ligeras, las carnes, lácteos, pescados, huevos y frutos secos no deben combinarse con cereales, pan, pasta, harinas y galletas; por el contrario, ensaladas y verduras combinan con todo.
Hidratarse adecuadamente: con tisanas depurativas, hierbas como el tomillo o el romero, la alcachofa, cola de caballo, depurativas para el hígado y los riñones. También hay que tomar agua de calidad, té pu-erh, Rooibos y te Mu.
Cuidar el intestino: con alimentos marinados y que fermentan por sí solos, como los pepinillos, cebollas, zanahorias, nabos, jengibre, repollo, alcaparras, olivas, kombucha y Aloe Vera.
Exposición al sol: es recomendable exponerse al sol 20 minutos al día con el cuerpo desnudo; de esta forma se consigue que el cuerpo produzca vitamina D.
Hacer ejercicio físico regular: caminar 1 hora al día y hacer estiramientos musculares, para tonificar la musculación y activar la circulación sanguínea.
Ayunar un día a la semana: tomando fruta y verdura, o tomando en la cena únicamente verdura uno o dos días a la semana, con el objeto de limpiar y depurar los órganos internos sobrecargados.
Hidroterapia: con baños de mar o en balnearios; también se puede practicar en casa, añadiendo 2 kilos de sal marina a la bañera; por un efecto de osmosis, se depura el organismo, incorporando sales minerales al cuerpo y desechando residuos. También con
Tomar alimentos de apoyo, depurativos y energizantes: algunos de ellos son el ajo y la cebolla, tanto natural como en guisos, con la alternativa del ajo negro; las semillas de sésamo, el umeboshi, la cúrcuma, los frutos rojos, la granada, el polen de abeja, las semillas de chia, la quinoa; y como edulcorante el sirope de arroz y la miel.
Tomar alimentos ricos en calcio: el calcio se puede obtener de las almendras, garbanzos, sésamo, brócoli, coliflor o col y sardinas. Sirve para mejorar la salud de nuestros huesos y dientes.